3. La Orientación debe extenderse a todas las necesidades y capacidades del sujeto. La Orientación es un proceso unitario que asiste a la persona en todas sus necesidades, tanto en las que permanentemente requieren satisfacciones para un adecuado desarrollo, como en las específicas que señalan su evolución personal y las exigencias del medio en que vive. Arthur Jones (1972), escribe: "Las necesidades humanas son la base de la Orientación: la Orientación se asienta sobre el principio de la conservación de la vida y energía humana......La necesidad humana constituye su fundamento". Es decir, la Orientación se basa en la idea de que todos los hombres necesitamos ayuda durante el transcurso de nuestra existencia. Knapp (1986) comenta: "Debemos recordar que el niño entero va a la escuela". Cada niño posee dentro de sí potencialidades que le permiten desarrollar varias áreas de su personalidad, y en diferentes proporciones al mismo tiempo. La Orientación debe interesarse por el desarrollo de todas las potencialidades del niño como sujeto y por la adecuada adaptación de éste al grupo social donde le corresponde interactuar.