4.1   Componente tecnológico.

 

Históricamente a la aplicación práctica de la Didáctica se la ha denominado “tecnología” como aplicación en la acción de los procedimientos de intervención técnica que se basan en los conocimientos científicos. En el uso vulgar no suele distinguirse entre técnica y tecnología, ni entre Ciencias aplicadas y tecnológicas o entre tecnologías y los instrumentos materiales utilizados por éstas. Quizá la técnica sea un proceder más artesanal y precientífico y la tecnología, la técnica que emplea conocimientos científicos.

 

Unos creen que las tecnologías buscan decisiones y efectos prácticos y que el conocimiento científico busca la Teoría, mientras que otros consideran que Ciencia y Tecnología forman un entramado indistinguible que se caracteriza por hacer uso de un tipo de razón instrumental. Esta interpretación puede ser la más adecuada a la Didáctica, ya que la tecnología es imprescindible a la hora de resolver científicamente los problemas prácticos o de intervención educativa. La esencia de la tecnología radica en la utilización de Teorías científicas y su adaptación para conseguir determinados fines.

 

La Didáctica considerada como tecnología proporciona un “saber” que supone un conocer el objeto y no meramente reflexionar sobre él. La reflexión tecnológica, en la medida en que ha estado conectada con la realidad, ha permitido experimentar y validar modelos de interrelación de los elementos que conforman la realidad escolar, potenciar el análisis de los recursos, posibilitar pautas para la evaluación del aprendizaje o para el desarrollo de otros ámbitos...

 

En definitiva, la Didáctica reúne ciencia, técnica y tecnología, teoría y arte. Para algunos autores la tecnología eliminaría lo intuitivo, lo no intencional y lo asistemático; para otros en cambio, la tecnología didáctica es una forma sistemática de planificar, conducir y evaluar un proceso de aprendizaje basado en el desarrollo del conocimiento humano.